Coincidencias.

reloj6
"Cuando murió Padre, de ese modo tan sorpresivo e inútil, Madre se empeñó en que yo conservara algunas de sus pertenencias.
No pude -ni quise- revisar esos objetos hasta unos días más tarde, cuando las lágrimas habían dejado ya sitio al frío del vacío.

Entre sus cosas estaba su reloj; ese que años antes le había regalado y que no se quitaba jamás.

Las manecillas, permanecían quietas marcando la misma hora en la que me dijeron que había sucedido todo. El reloj estaba parado.

Un tremendo escalofrío recorrió mi espinazo y, a pesar que presumo de escéptico, no pude evitar que mi mente comenzara a hilar desvariadas conjeturas basadas en la casualidad de ese hecho.

Llevé ese reloj encima durante semanas...

Hoy ya no lo llevo puesto, pero, a menudo, a cierta hora de la tarde, siento una desazón que no puedo explicar y el mundo me parece, por unos instantes, un poco más triste."

Gerónimo Allers " Impresiones" (*)

(*)Libro extraído de la Biblioteca imaginaria de autores perdidos de jverbo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario